La Soledad no es buena compañera de viaje.

Tal vez se pregunten porque volví a publicar hoy, pero la verdad la otra entrada ya estaba programada. Decidí llamar esta entrada así porque hoy descubrí y entendí que la soledad en verdad no es una compañera de viaje muy recomendable, ni de vida, por eso es mejor sacarla del equipaje.

Estos últimos días me he sentido de verdad solo y triste, tanto así que me enteré que el cambio de vuelo me sale en 133 Euros y que el vuelo más próximo con la misma tarifa es el 7 de marzo a las 10:50 de la mañana, sin embargo, comprendí que esa no es la mejor opción además sumémosle el hecho de que a mi riñón se le ocurrió dar lata otra vez, pues fue bastante desesperante la situación.

Por eso decidí pensar mejor las cosas, valorar todo, comparar los pros y contras de quedarme aquí o regresar a México. Si, el sacrificio es grande pero aún más grande va a ser la recompensa, son muchos kilómetros pero la distancia es corta todos estamos ahora a un clic de distancia. Agradezco infinitamente a esas personas que han estado conmigo a lo largo de esta etapa con altas y bajas, pero pues así se empieza.

Ayer por la tarde me senté en una banca en Plaza Catalunya, por fin esa metáfora que dice que por estar centrado en el árbol justo de frente a nosotros, nos perdemos todo el bosque; si es cierto, a veces por un solo problema o situación, nos perdemos todo lo demás, nos cegamos y centramos nuestra visión del mundo en una sola cosa. Tal vez alguien día “no pasa nada”, pero siempre he dicho que los problemas no importa sin son grandes o pequeños, son propios y la única persona que los puede dimensionar es uno mismo.

Así como hace unos días escribí que hay que conocer lo que nos rodea actuando como visitantes aún cuando se es local, entendí que estoy de visitante pero de cualquier manera es momento de sentirme local, porque aquí voy a estar al menos durante este semestre y pues mejor disfruto lo que tengo aquí y ahora porque no se cuanto vaya durar, como dice el pensamiento “cuidar este día…porque el hoy bien vivido hace de cada ayer un sueño de felicidad y de cada mañana una visión de esperanza”. Lo que pasó ya fue y lo que viene es mejor esperarlo con alegría y a veces hasta con ansiedad.

También dicen que nunca esta mas oscuro el cielo como antes de que amanezca y creo que ya empezó a amanecer, así que mejor me concentro en ver todo el escenario que esta alrededor y no solo lo que esta enfrente. Pero bueno, así es esto del abarrote, a veces se vende y a veces no. Nos vemos pronto. Les dejo una imagen de Plaza Catalunya que me gustó porque la señora se veía tan feliz dándole alpiste a las palomas, jejeje.